POBREZA ENERGÉTICA: “LO IMPORTANTE ES SER ÚTIL”
El mayoral Mayoral abría la manifestación justamente tras la
pancarta reivindicativa que subrayaba el slogan que explicaba todo: “No más
cortes de luz”. Mayoral iba enfurruñado porque unas horas antes había sido
anunciado un avance, por parte del PSOE y el Gobierno, que garantizaba que ya
no habrá cortes de luz, es decir, que la pobreza energética y sus perversas
consecuencias entraba en vías de subsanación o de solución. El enfurruñamiento
del mayoral Mayoral contrastaba con el
semblante sereno y tranquilo de quien le acompañaba, López Uralde, que como
buen ecologista mostraba un aire hierático y solemne, calmado en su ánimo, y
quizás contento. Pero el mayoral Mayoral marchaba enfurruñado y arisco, como
suelen hacerlo los malos perdedores.
Desgraciadamente la Política discurre en la actualidad por
extraños derroteros. En tiempos de antaño, aún presentes en nuestra memoria y
vivencias, también había ganadores y perdedores en relación a las decisiones
políticas que se tomaban. Había ciudadanos que se sentían ganadores cuando una
decisión les beneficiaba, y había también quienes se sentían perdedores. Unos y
otros pertenecían a eso que se denominaba “sociedad civil”. Sin embargo ahora
el debate político pone más énfasis en circunscribir los ganadores y perdedores
al propio mundillo de las formaciones políticas, de modo que el mayoral Mayoral,
sabiéndose y sintiéndose “perdedor” frente a los socialistas que marchaban a
sus espaldas, aunque con su misma intención y empeño, les dedicó algunas
lindezas propias de los derrotados. Por cierto, nunca entenderé por qué se
sienten derrotados quienes no consiguen llegar a la meta los primeros aunque
lleguen a la misma meta y al lado de dichos primeros.
El oportunismo es un lastre para la Política y también para
los políticos. En ocasiones acelera las decisiones en exceso, del mismo modo
que en otras las demora por inservibles sin haber sopesado si son tal
realmente. Y ocurre que los oportunistas, en aras de reivindicar lo perfecto
suelen rechazar cualquier tipo de avance despreciando lo bueno. Tal ha ocurrido
a Podemos, que se ha visto aventajado por el acuerdo del PSOE con el Gobierno
para prohibir de forma tajante los cortes de la luz motivados por la pobreza
energética. Habrá que matizar más y mejor, habrá que legislar meticulosamente
para frenar la misantropía de las empresas eléctricas y la picaresca de los
consumidores más arteros, pero el paso importante ya ha sido dado allí donde
tenía que darse, en las Instituciones. Y ha sido eso lo que enfurruñó al
mayoral Mayoral, que deseaba convertir la “manifa” en una fiesta de Podemos, en
la que sin duda se mostraría al PSOE como uno más de los que constituyen la
“casta” a la que la “gente” denuesta.
Pero el tiro salió por la culata, de modo que solo quedaron
patentes el compromiso de todos los manifestantes, incluidos los que portaban
banderas rojas del PSOE, y la pataleta del mayoral Mayoral que, falto de otros
recursos más elocuentes se quedó en palabras despreciativas hacia el acuerdo
del PSOE como “pacto secreto vacío”, “chanchullo” o “paripé”.
Lo cierto es que ya no se producirán cortes de luz por causa
de pobreza energética, para lo cual habrá que definir qué es la “pobreza
energética”, un término ambiguo que en manos de Podemos puede alcanzar hasta el
infinito. Lo cierto es que se va a modificar la Ley del Sector Eléctrico que
afectará, y doblegará sin duda, al que es uno de los sectores económicos más
potente y poderoso de España. Es el comienzo de algo más ambicioso, al menos a
tenor de lo anunciado por el portavoz del PSOE: “Es una reforma estructural y
es el principio del fin de la pobreza energética”. No solo eso, sino que es un
inicio de algo más pues este acuerdo deberá extenderse a los ciudadanos que
tienen problemas para pagar la factura del gas. Si evoluciona así, tal como ha
sido anunciado por los protagonistas del acuerdo, no volverán a producirse
muertes tan bárbaras y dolorosas como la de la anciana de Reus, que murió en el
incendio provocado por una vela encendida en su casa desprovista de
electricidad por habérsela sido cortada.
El mayoral Mayoral deberá alegrarse con lo acordado, y sobre
todo deberá trasladar a los suyos de Podemos lo que le prestó el portavoz
socialista de Madrid Antonio Miguel Carmona después de que fuera insultado por
el mismo Mayoral. Carmona dijo que en la Política actual los miembros de
Podemos han elegido la estrategia equivocada de “ser importantes antes que
útiles”… O sea, lo contrario de lo que deben ser los que se consideren de
izquierdas, que han de anteponer la utilidad, que siempre beneficia a la gran
mayoría, a la importancia, que solo afecta a los presumidos y fatuos, al menos
en la acepción que es aplicable en este caso.
FDO. JOSU MONTALBAN