martes, 16 de julio de 2013

¡MOCIÓN  DE  CENSURA,  YA!
¿Debe el PSOE someter a una Moción de Censura a Mariano Rajoy y a su Gobierno? No, si solo quiere conquistar el poder. Sí, si lo que pretende es infligir una derrota al PP y devolver la decencia a los españoles que depositaron su voto a favor de tanta indecencia. El Osado Diputado popular Floriano ha dicho hoy Lunes que el PSOE no tiene lo que debe tener para presentar una moción de censura. Como lo ha dicho en una rueda de prensa, yo he traducido la bravuconada por “el PSOE no tiene cojones para presentar una moción de censura”, pero no, se refería a que “no tiene candidato ni tiene programa”. Asombra el atrevimiento de este hombre. Alguien tiene que hacer ese papel agresivo y sinsorgo, pero el momento exige responsabilidad y mucho respeto a los españoles, que necesitamos un Gobierno serie y responsable.
El momento es muy delicado. Ni Rajoy ni ninguno de los que le rodean saben administrar este momento. Ninguno de ellos pensaba que Bárcenas iba a llegar tan lejos. Pensaban tratarle como a un corrupto al uso, es decir, uno de esos políticos faltos de principios (que puede haberlos, y los hay, en todos los partidos) que de pronto se ven ante la caja registradora de un partido político que gobierna y, por ende, puede usar su poder institucional para trapichear. Y ocurre, casi siempre, que leves trapicheos crean afición y llevan a grandes trapicheos, y a corrupciones terribles. Si así hubiera sido todo habría desembocado en la encarcelación de Bárcenas y de los cómplices y testaferros que le hubieran facilitado las fechorías, pero el asunto es mucho más grave. En realidad el corrupto es el sistema en manos de este PP ramplón a cuyos dirigentes no les bastaba con cobrar los suculentos sueldos de diputados, senadores, ministros o presidentes de gobierno.
Así que una moción de censura, ahora mismo, no necesitaría candidato ni programa especiales. ¿Puede presumir el PP de candidato teniendo a Rajoy contra las tablas? Pues que decida por sí mismo dimitir y convocar unas elecciones que acaben con este maremágnum miserable en que nos tienen metidos. ¿Para qué le ha servido su programa electoral al PP? Solo para transgredirlo, para no cumplir ni una sola de sus promesas-trampa? ¿Constituye, acaso, alguna garantía para los españoles el candidato Rajoy, tan amarrado formal y sentimentalmente al corrupto Bárcenas? Al infeliz e insustancial Floriano más le valdría que alguien le librara del terrible cáliz que es para él defender lo indefendible y justificar lo injustificable.
Pero el PSOE, con Rubalcaba a la cabeza, debería reaccionar con contundencia. ¡Moción de censura, ya! Aunque se sepa derrotada en el recuento de los votos. Sin embargo, la derrota política y ética del PP es segura, de ese modo la ciudadanía recobrará un poco de la dignidad que perdió cuando concedió la mayoría absoluta a quienes ya estaban salpicados por la corrupción sistémica. Sí, sí, otros partidos también cuentan con casos de corrupción en sus agendas pero, tal como se viene comprobando, lo del PP no es solamente corrupción, sino una metástasis corrosiva que amenaza al sistema y pone en riesgo la democracia. Para que no se tambalee su chiringuito parecen dispuestos a agitar y violentar incluso la estructura del Estado. Quienes, como Cospedal, no han dudado en quitar el salario a los diputados elegidos por los ciudadanos para la Cámara de Castilla La Mancha, han estado cobrando sobresueldos porque les parecía poco sus sueldos oficiales.
De modo que solo cabe presentar una moción de censura que acabe con este cáncer insoportable, y devuelva a los españoles, en la medida de lo posible, su dignidad, la cual ha puesto en entredicho este Gobierno de Rajoy, altivo y soberbio. Está en juego la Democracia.
Fdo.  JOSU  MONTALBAN